Javier Coloma: "La depresión de Ronald"

La crisis ha afectado a todos los rincones del planeta. Hasta las más altas esferas no han podido resistir el empuje despiadado de la recesión económica mundial. Es el caso del Mc Donalds. La conocida marca de restaurantes ha visto en los últimos meses cómo la situación se tornaba en imposible y eso ha afectado a su rendimiento.

Su último spot televisivo lo dice todo. Y es que la actual campaña de la empresa se parece sospechosamente al afamado spot de una reconocida marca de “coca-cola” donde un señor argentino muy cool, enumeraba el vasto elenco de personalidades al que iba dirigido su producto. Juzguen ustedes.

Este modesto periodista ha tenido acceso a las oficinas de la afamada cadena de restaurantes y ha hablado con su directivo y representante más afamado: Ronald Mc Donald. Con semblante serio, cabeza gacha y algo paliducho, declaró: “La situación nos tiene preocupados. No vivimos una alarma igual desde que descubrimos a aquel geranio que se había hecho pasar por cajero de nuestros restaurantes durante año y medio. Nadie sospechó nada de aquello. Era un poco callado, es cierto, pero era igual de eficiente que el resto. Una vez, incluso, fue capaz de poner una bebida sin hielo porque así se lo habían pedido”. Declara el payaso. 

Este geranio puso en jaque a una de las multinacionales más afamadas del planeta.

 Sorprendido en una salida nocturna por la capital de España.

En un concurrido local de la noche madrileña

 Con un grupo de amigos en Cadaqués

Su expresión empeora todavía más cuando se le habla del ya mencionado spot: “Llegó un momento en el que tuvimos que recortar plantilla y el equipo creativo no podía ser menos”. “Decidimos quedarnos con John, porque cuenta unos chistes muy buenos imitando a Chiquito, diciendo: (se levanta de su asiento) ¡Jaaarrr, cobarrde!, bueno… a mí no me sale muy bien (vuelve a sentarse); y con Paul y Martin, que bailan canciones de los Blues Brothers en todas las cenas anuales de la empresa”, dijo el conocido payaso, mientras se encendía su “pitillo matutino”: “Uno de los pocos vicios que tengo, me encanta el dibujito del camello”. “Quizá debimos quedarnos con Brenda. No era muy guapa, más bien feúcha, pero hacía un pastel de manzana riquísimo”, concluyó.

El futuro, sin embargo, no preocupa tanto como el presente a un hombre que reconoce vivir uno de sus peores momentos: “El otro día me confundieron con Woopy Goldberg, y por ahí no paso”. “Remontaremos como lo hemos hecho siempre. Que nadie se olvide de que yo inventé el Happy Meal y que puse el desglose calórico en todas las bandejas de mis restaurantes, añadiendo en la última línea: presuntamente”. “En la siguiente campaña queremos poner a niños sonriendo con una bonita música de fondo. Queremos niños de todas las razas, sin excepción, que sonríen y parecen felices. Nunca se ha hecho nada igual con esta marca”.