miércoles, 20 de marzo de 2013

Hagamos el amor


Me gustaría preguntaros a cada uno de vosotros, qué caso le hacéis a los mails que os llegan desde vuestra compañía de telefonía, a las newsletters que estáis suscritos, o a las últimas ofertas que os llegan desde Booking.com porque un día reservasteis un hotel desde ahí. Y sobre todo, me gustaría preguntarle a mis lectores expertos en performance, cual puede ser el ratio de apertura de este tipo de mails.

En mi caso particular ya os digo, que todos o casi todos los correos de este tipo que llegan a mi bandeja de entrada pasan directamente a mi papelera sin pasar por mi conciencia. A veces no me da tiempo ni siquiera a leer el asunto.

Menos mal que algunas veces mi conciencia sí repara en el asunto, y te encuentras campañas de CRM que merecen la pena, como la que os contaré a continuación.

El mail venía de parte de ONO (y tenía muchas probabilidades de ser eliminado) y el asunto decía ¿Crees que estoy gorda? así, tal cual leéis. Una pregunta que en condiciones normales te hace pararte y levantar la vista de lo que estás haciendo, pero mucho más si viene de tu operador de teléfono (el de mis padres en este caso).

Lógicamente abrí el mail, en un primer momento pensé que podrían haber sufrido un ataque de algún hacker o algo así, pero en cuanto comencé a leer se despejaron mis dudas. No se trataba de un ciberataque, sino de una campaña perfectamente orquestada para celebrar el segundo aniversario de su Servicio de Atención al Cliente.



El mail había conseguido lo que pretendía, fijar mi atención y que lo leyera, además tengo que decir que ante esa pregunta es difícil no tener la tentación de entrar al servicio de atención al cliente y participar en la promoción. 

Para mí el mail fue un completo éxito, y me lleva a pensar que aún queda mucho por hacer en el terreno del CRM, tal vez haya que dejarse de hacer declaraciones bonitas, de tirar de tópicos, de versos de Becquer, y hagámosles el amor de una vez por todas. Tal vez eso les conquiste mucho más. 

Yo antes de recibir el mail de ONO no pensaba que estuviera gorda, sino algo mucho peor, no pensaba en ONO y mucho menos en su servicio de atención al cliente, ahora pienso que no está gorda sino que está estupenda, es más creo que aunque lo estuviera, no me importaría. 


1 comentario:

Aída dijo...

Una gran manera de llamar la atención... pero desde mi punto de vista, una promesa incumplida: cuando me prometen una historia, quiero encontrarme con una, no con un correo totalmente insípido que no tiene nada que ver con el titular.