Hace algún tiempo, Joan Jimenez, decía en Buenafuente que todos éramos una marca, mientras Andreu le miraba con cierta incredulidad. Yo siempre he estado de acuerdo con esta afirmación, y mucho más en la era 2.0.
Hablaré sobre la mía, que es la que mejor conozco, y además nunca he tenido queja de ella, a pesar de lo difícil que es posicionar tu nombre en Google cuando (como bromeo en Círculos amistosos) un pueblo se llama igual que tú. Aunque creo que entrar en una batalla legal por el nombre comercial ahora no nos llevaría a ningún lado, ni a ellos ni a mí.
A todo esto, de qué quiero hablar, que me lío. Quiero hablar del lanzamiento de un producto. Yo. Y no es que esté buscando piso o trabajo (o novia), que pueden ser tres momentos claves en los que más que nunca somos marcas. Les voy a hablar de algo mucho más difícil. La búsqueda de Sofá.
Hace no mucho, conocí el Couchsurfing, una modalidad de intercambio cultural en la que gente de diferentes países ofrece sus sofás a otros viajeros, o se ofrecen para hacer de guía por la ciudad o simplemente tomar un café. Interesante.
Tan interesante que yo me he decidido a probarlo en Londres en unos pocos días, pero ya les digo que, a nivel de marca es, sin duda, uno de los lanzamientos más difíciles.
Cuando buscas trabajo, recursos humanos ha gastado unos minutos en leerse tu argumentario de ventas, y además te concederán, con suerte, unos minutos en entrevista para que tú, convertido en tu propio comercial despliegues todo tu catálogo. Parecido ocurre cuando buscas piso.
Cuando buscas novia, tu marca tiene que ser más emocional, pero aún así el consumidor siempre puede estudiar el producto antes de adquirirlo.
En el couchsurfing es completamente distinto, el estás en un lineal, y lo único que se sabe de ti (cuando aún no tienes referencias, cuando tu marca es nueva) es lo que tú packaging (to perfil) indica. y con eso, y un breve mensaje comercial, quieres que el consumidor te meta en su casa y comparta algo tan valioso como su tiempo, en una marca como tú, como yo.
Un reto, interesante, para cualquier marca.
1 comentario:
Cierto es que todos somos marca, pero eso siempre ha sido así. La diferencia es que ahora, con el boom 2.0 y de las redes sociales, la persona/marca está mucho más visible y adquiere más importancia.
Aunque también habrá que diferenciar al que quiera generar marca de su persona o no. Aunque está claro que, aun sin quererlo, el simple hecho de tener presencia en internet, ya sea con blog, con twitter o con facebook público, irá generando nuestra propia marca.
btw, interesante artículo. Hace reflexionar. ;)
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